Para contextualizarse en el concepto de
desintegración familiar, es necesario primero que todo conocer cuál es el
concepto de familia y cuáles son las características o eventos en particular
que llevan a concluir o determinar que dicha familia está afrontando un serie
de situaciones que la pueden a llevar a separarse o desintegrarse de alguna
forma, perdiendo de vista el objetivo para el que fue creada y pensada desde el
principio.
Teniendo
en cuenta lo anterior, es necesario empezar por presentar el concepto de
familia, entendiendo esta como “una unidad social primaria que se caracteriza por sus vínculos, y por las relaciones afectivas que
en su interior se dan, constituyendo un subsistema de la organización social.
Los miembros del grupo familiar cumplen roles y funciones al interior de esta,
que son los que permiten relacionarse con otros sistemas externos, tales como
el barrio, el trabajo, la escuela, etc.
Es dentro del grupo familiar en donde se aprenden
los valores y se transmite la cultura, la cual será filtrada y orientada por
cada sistema. La ubicación geográfica de este sistema familiar (rural o urbano)
determina también ciertas características de la organización y los roles que en
ella se dan”[1].
La misión de la organización familiar consiste,
pues, en buscar el equilibrio: hacia el interior, entre las expectativas y
deseos de sus miembros; hacia el exterior, en la mediación entre las exigencias
de cada individuo o de todo el núcleo y las expresadas por la sociedad. Según
Minuchin & Fishman (1984), en todo sistema, y para el caso en la familia,
hay una relación entre las partes que lo conforman, de manera que cualquier
cambio en algunos de sus elementos modificará el estado interno de las otras y,
a su vez, el del sistema en general.[2]
Considerando lo expuesto, es claro que para entender
cómo funciona una familia, es necesario hablar de una estructura familiar, pues
es a través de ésta es que se establece la forma como funcionalmente se mueve
dicha unidad, de ahí que la familia se entienda como un sistema que para que
funcione debe ser operado a través de una serie de pautas que lo regulen.
Dichas pautas le dan estabilidad al sistema,
permitiendo que se mantenga, pero deben caracterizarse por ser flexibles, de
tal forma que acepten cambios y su
proceso de adaptación a dichos cambios sea rápido y efectivo. Las pautas que estructuran a la familia son:
- · Normas: Son una guía establecida o una regulación para la acción, conducta, método, disposición. Las normas como parte de los procesos sociales son impuestas, representan y generan los esquemas de comportamiento. No son buenas, ni malas sino adecuadas o no al contexto y evolución personal y social de quienes las aportan. La familia donde las normas fortalecen la libertad para comentar cualquier cosa, tanto si es molesta, alegre, o pecaminosa, tiene la posibilidad de ser una familia funcional.
- · Reglas: Son acuerdos relacionales que prescriben o limitan los comportamientos individuales en una amplia gama de áreas comportamentales, organizando su interacción en un sistema razonablemente estable. Las reglas pueden ser: De Relación, Implícitas, Explicitas y Secretas.
- · Roles: Son todos los papeles que juegan los miembros de la familia. Es la única manera de organizar la estructura familiar. El rol que juega la familia es fundamental para la protección, estabilidad, conformación de valores, es motor y freno de acciones diversas, genera orgullo, sentido de pertenencia y es fuente de tristezas, alegrías que forman parte del vivir cotidiano. Es importante que dentro de la familia los integrantes tengan claros sus roles, rol de padres y rol de hijos, que cada no conozca sus derechos, deberes y responsabilidades frente al otro.
- · Límites: Están determinados por las reglas que definen quién participa y cómo participa en la familia o el subsistema. Sirven para demarcar los diferentes sistemas y subsistemas, ayudan a lograr la diferenciación. Los límites están relacionados con las reglas, normas y jerarquías.
- · Jerarquías: Define la función del poder y la estructura en la familia y la diferenciación de roles entre padres e hijos. “Todo sistema requiere que exista una jerarquía, una distribución del poder” (Barbado y otros, 84). Para valorar la jerarquía en una familia hay que observar quien ostenta el mando, quién ejerce control sobre quien, el nivel de competencia individual y de dependencia de cada uno de los miembros familiares. Habitualmente en una familia se establece una jerarquía de poder entre los padres y los hijos; también entre los hermanos. Para la funcionalidad familiar es necesaria una jerarquía clara y unívoca, independientemente de que varíe su distribución en el transcurso del ciclo vital.
Una vez revisado el concepto de familia y
estudiados los fundamentos de su estructura, podríamos definir la
desintegración familiar como “La distorsión o mal funcionamiento de los
roles asignados, creando una situación inadecuada, una atmósfera de
insatisfacción, angustia, depresión, malestar en general y por tanto, poca
comunicación entre sus miembros” (Tomado de ”http://www.tupatrocinio.com/bint.cfm/proyecto-de-ladesintegracion-familiar.htm.(20/01/201016.37)
Frente a lo anterior, es claro concluir que la
desintegración familiar es un problema en la medida en que la estructura familiar
existente se hace disfuncional, no puede desempeñar eficazmente su finalidad
específica, creando consecuentemente un desequilibrio en sus interrelaciones
con las demás estructuras sociales.
Los estudios realizados en diferentes ámbitos han
establecido que los niños y adolescentes víctimas de la desintegración familiar
tienen características propias que los diferencian de otros, en general poseen
una autoestima muy baja, son inseguros, se aíslan y con frecuencia los
sentimientos de abandono y de inferioridad los acompañan en su vida futura;
también experimentan fuertes traumas psicológicos, puesto que no logran
asimilar del todo el hecho que sus padres no los volverán a atender como antes,
no convivirán igual, y no les brindarán la confianza y apoyo que necesitan.
Investigaciones al respecto de este tema que se han
desarrollado, han llegado a establecer una serie de factores generales que han
influenciado en forma importante la ocurrencia de dicha problemática, así:
- · Factor Económico: Solamente el trabajo del trabajo del padre no brinda las condiciones económicas suficientes que requiere la familia para ser sustentable en el tiempo. Entonces la madre tiene que salir a apoyar este proceso y la distribución inadeucada de tiempo y responsabilidades frente al trabajo y la casa entre los padres puede llevar a que la estabilidad afectiva de la familia se afecte.
- · Factor Afectivo: Falta de amor entre los cónyuges, mala comunicación que pueden llevar a la infidelidad y por ende a la separación.
- · Factor Social: Problemas como el alcoholismo, drogadicción, mala inversión de recursos económicos, machismo, pueden generar situaciones que desintegran a la familia.
- · Factor Cultural: Hace referencia a la educación de los cónyuges que en determinado momento puede afectar la capacidad de solucionar en forma asertiva los problemas que se presentan.
- · Factor Religioso: Cuando los miembros de la familia pertenecen a religiones distintas puede conllevar una ruptura familiar.
No obstante lo anterior, para el caso de la localidad objeto de
investigación no necesariamente pueden ser estos los factores que los miembros
de esta comunidad consideren sean los desencadenantes de la Desintegración
Familiar, será dentro del desarrollo de la investigación que se confirmen
algunos, se desestimen otros y se
planteen unos nuevos. Todo esto bajo el
contexto socio-cultural que hace parte de dicha comunidad.
Por tal razón, es que cobra
una particular importancia esta investigación, pues nos permitirá establecer un
punto de vista probablemente distinto acerca de los factores que en la
actualidad están generando dicha problemática y así mismo establecer unas
posibles acciones de tratamiento que provengan de las partes involucradas
dentro de la comunidad sobre la que se está delimitando este proceso.
[1] Galarza, J. y Solano, N. (2010). Desintegración Familiar Asociada al Bajo Rendimiento Escolar. Tesis
para acceder al título de Licenciatura en Psicología Educativa. Universidad de
Cuenca. Cuenca – Ecuador
[2] Amarís M., Amar J., Jiménez M. (2005). Dinámica de las
familias de menores con problemas psicosociales: el caso del menor infractor y
la menor explotada sexualmente. Revista
Latinoamericana de Ciencias Sociales, Niñez y Juventud, 3(2)
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